Lawfare golpista

Imagen: Eneko en Diario Público

No se presentan a las elecciones, pero hacen campaña. No pegan carteles, pero admiten denuncias a sabiendas de su falsedad. No dan mítines, pero abren investigaciones. No participan en debates, pero practican diligencias. No son cabeza de cartel, pero descabezan carteles con sentencias. Ellas y ellos son sus señorías, los jueces y juezas que imparten presuntamente la Justicia en España. No son todos, pero son muchos, demasiados.

El espectáculo es lamentable. El del Tribunal Constitucional hasta que fue renovado y el del Consejo General del Poder Judicial por renovar, en la ilegalidad va ya para seis años. El de García Castellón, el de Marchena y otros tantos y tantas que mezclan ideología, militancia y Código Penal. El de la Justicia Europea enmendando la plana a la española cada dos por tres. Un espectáculo digno de países subdesarrollados, repúblicas bananeras, teocracias y dictaduras. Una Justicia que saca los colores al sistema, de sus casillas a la ciudadanía y que descose las costuras de la democracia.

La Justicia española ha salido del armario franquista al mismo tiempo que la ultraderecha, buena parte de las Fuerzas de Seguridad del Estado, la gran mayoría de los medios de comunicación y lo más zafio, disruptivo y nocivo de la sociedad. La Justicia, es bien sabido en todo el mundo, funciona a golpe de talonario y ahora, en España, también a golpe de militancia política y compromiso ideológico.

En esta “democracia plena”, como en las cunas de la democracia, los golpes de estado son mediáticos, económicos… y judiciales. La magistratura española ha hecho un curso contra reloj para anular a Podemos, apartando a Juan Carlos Monedero, a Alberto Rodríguez o a Victoria Rosell, y se ha doctorado derribando el gobierno valenciano a golpe de maza –como hicieron en Portugal, como hizo Bolsonaro, como hizo y hace Trump– y ahora apuntan la pistola directamente a la nuca de Begoña Gómez para asesinar a un Gobierno Legítimo y Democrático. ¡¡Y el marido de la encausada dice confiar en esta Justicia!!

Tras este Golpe de Estado, Mediático y Togado, volverá el franquismo a gobernar y a virar la nave 180 grados para esquivar el escollo del progreso y continuar la tradición pirata de atacar la flota del reino y expoliar. Tienen garantizada la impunidad por jueces tuertos del ojo izquierdo, con una maza asomando por una puñeta, un garfio por la otra y una pata de palo bajo la toga. Son de los suyos: los suyos. A esos se les juzga por la puerta de atrás pero no se les condena.

Esta entrada fue publicada en Todos.

Deja un comentario